
Concepto de Convivencia
I
Para abordar el concepto de convivencia es importante partir de que el ser humano vive en sociedad y por lo tanto se relaciona diariamente con otras personas por diferentes circunstancias y en diferentes contextos y por lo tanto comparte intereses comunes que los identifica o los relaciona. De tal manera que el ser humano al momento de compartir existe la convivencia y un ejemplo de convivencia del ser humano desde que nace es en el hogar con sus padres hermanos y demás miembros de la familia.
Uno de los principales éxitos de la convivencia es el consenso para que esta se vuelva agradable y lo anterior depende de los comportamientos éticos y adecuados de los integrantes de un grupo con los cuales se comparte intereses comunes.
La convivencia es el acto del ser humano de convivir con otras personas y se la define como la coexistencia pacífica y armoniosa de grupos humanos en un mismo espacio. La convivencia así como puede volverse enriquecedora por el compartir e intercambiar valores, conocimiento, actitudes, cultura puede volverse complicada por aspectos que el ser humano no comparte o no se identifica y por lo tanto no los adopta o los asume en su vida diaria.
Hay muchas diferencias que dificultan la convivencia como son por ejemplo las costumbres y hábitos de una persona a la cual toca que adaptarse si se quiere convivir en ese contexto o llegar a concertar y colocarse de acuerdo mediante el dialogo llegando a un consenso. El respeto y la solidaridad son aspectos importantes para que exista la convivencia ya que son valores imprescindibles que brindan armonía.
Es importante diferenciar los tipos de convivencia la convivencia con la familia es muy diferente a la convivencia con otros seres humanos en el marco de una comunidad que puede ser un barrio o una ciudad ya que la intimidad que se presenta en ambos casos es incomparable.
También, aunque no compartamos proyectos personales, de alguna manera, con nuestros amigos y con nuestros compañeros de trabajo tenemos otra especie de convivencia, pero convivencia al fin, ya que al igual que cuando se comparte una misma casa, en el trabajo, durante muchas horas se comparte el mismo espacio físico, entonces, al igual que en casa se deberán hacer concesiones, surgen disputas por las diferencias y consensos tras las discusiones, entre otras cuestiones.
Diversas corrientes sostienen que la conciencia del Yo sólo puede tenerse a partir de la existencia del Otro. En dicha interdependencia social que se produce en la convivencia, cada persona se define a sí misma.
Los problemas que puedan originarse de la mala convivencia ocasionan problemas de salud física tanto como enfermedades cardiacas, estrés y estomacales por lo tanto las relaciones de amistad y apoyo de familiares hace una mejor convivencia con lazos sociales estrechos de bienestar tranquilidad y armonía.
La convivencia muestra la inteligencia emocional del corazón humano que se basa en el respeto hacia el otro. Lo positivo es tener acciones que hagan la vida agradable a los demás. Una simple sonrisa mejora la convivencia. Al igual que palabras como gracias, lo siento y por favor son expresiones que agradan la convivencia con el otro.
De acuerdo a lo que sostienen muchos profesionales de la medicina, la psicología y la sociología, la convivencia resulta ser un factor trascendente para el bienestar emocional y para la salud de los individuos. Muchos estudios que se han realizado al respecto de la importancia de la convivencia, de la relación con los otros, han demostrado que aquellos que se encuentran solos están más predispuestos a sufrir accidentes, enfermedades mentales, suicidio, entre otras problemáticas; si bien la autoconfianza y la independencia son características importantes para cualquier individuo, el apoyo de los demás y la compañía también resultan imprescindibles, a la par de las mencionadas. En tanto, para lograr lo que se denomina una convivencia positiva en armonía, serán condiciones fundamentales el amo, el respeto y la tolerancia hacia los demás, aún cuando sus opiniones y acciones se encuentren en la vereda opuesta a la nuestra. De lo contrario, de manifestar una actitud a la defensiva y siempre en pie de guerra, seguramente, la convivencia resultará muy pero muy difícil con aquella persona que se manifieste de esta manera. Entonces, es imposible coincidir con papá, con mamá, con un hermano, con un amigo, con un par del trabajo y con la pareja en un ciento por ciento, pero si las diferencias logran zanjarse de una manera adulta, respetuosa y con mucho cariño será simple lograr una buena convivencia
El respeto y la solidaridad son dos valores imprescindibles para que la convivencia armoniosa sea posible. Por supuesto, existen distintos niveles o tipos de convivencia: la convivencia con la familia en el seno de un hogar es muy diferente a la convivencia con otros seres humanos en el marco de una comunidad (un barrio, una ciudad), ya que la intimidad de ambos casos es incomparable.
Diversas corrientes sostienen que la conciencia del Yo sólo puede tenerse a partir de la existencia del Otro. En dicha interdependencia social que se produce en la convivencia, cada persona se define a sí misma.
Los problemas de convivencia pueden impactar en la salud física. Algunos estudios demuestran que los inmigrantes tienen un mayor índice de enfermedades cardíacas que los pobladores nativos, una situación que se explica a partir de la ausencia de vínculos de amistad y del apoyo de los familiares. Una mejor convivencia, con lazos sociales estrechos, contribuye al bienestar.
La convivencia se puede llevar en diferentes ámbitos como: trabajo, hogar, espacios públicos, escuela, entre otros. Es de destacar, en una convivencia es fundamental existir y tener en cuenta los siguientes valores: el respeto, la honestidad, la tolerancia, la solidaridad, entre otros y, normas y códigos de comportamientos que hacen una buena convivencia.
